Destacado:

    «En Molaviajar tratamos de hacer siempre cosas diferentes e interactuar mucho con nuestros seguidores»

    Por el 6 junio, 2016

    Adrián y Gosia comenzaron la aventura de Molaviajar de la forma más sencilla: creando un blog para que sus familiares y amigos siguieran sus peripecias por el Sudeste asiático allá por 2009. Sin embargo, eso es el pasado, hoy no son dos, sino tres con Daniella y sus viajes, seguidos por miles de personas en las distintas redes sociales.

    Cuando planteamos esta entrevista, lo cierto es que fue muy sencillo conseguir su implicación. Eso sí, nos sorprendieron contestando a través de Whatsapp, algo que no nos había pasado hasta ahora.

    Se nota que disfrutan, que trabajan sus viajes y que se toman en serio la responsabilidad de tener seguidores…pero, ¿queréis saber más de ellos?

    ¿Cómo se lleva eso de tener más de 150000 seguidores en redes contando tus propios viajes?

    Al final cuando haces esto y la gente te sigue y apoya tus aventuras cada vez lo haces con más ganas. El tener tanta gente detrás, nos da más fuerzas para seguir haciendo vídeos de mejor calidad. Mientras se vean y sigan gustando, nos hace estar encantados. En general, felices.

    Seguiros es descubrir cosas nuevas de destinos que para muchos son más que conocidos, ¿cómo enfocáis cada nuevo viaje?

    Depende del tipo de viaje. Los hay que tienen que ver con una campaña y son distintos de los que tienen que ver con nuestra propia selección.

    Por ejemplo, ahora nos vamos a Zaragoza para grabar un tema con niños, haremos otra acción para oficinas de turismo, que se enfoca de manera distinta que cuando vamos a nuestro aire. A veces hacemos video guías y enfocamos el viaje a hacer las cosas que nos piden nuestros seguidores y hay otros que son más blog, más el día a día, más divertidos.

    Cada viaje se plantea dependiendo de lo que vayamos a hacer en cada destino, pero siempre con nuestra gracia, nuestra forma de viajar e intentando mostrar lo mejor posible el destino. No sólo es grabar las cosas sino la experiencia de una familia en ese lugar. Entendemos que nuestros vídeos no son superproducciones o no tienen ese toque corporativo,  sino que nos presentan como una familia viajando y contando la experiencia tal cual, sin filtros.

    Acabáis de aterrizar de Londres, donde habéis ido con seguidores vuestros gracias a un sorteo y, además, habéis hecho una quedada con molaviajeros. ¿Qué se siente viendo el cariño del público?

    Lo de Londres ha sido una experiencia única. No nos podíamos imaginar que íbamos a vivir lo que hemos vivido. En Molaviajar tratamos de hacer siempre cosas diferentes e interactuar mucho con nuestros seguidores.

    Queríamos ir más allá, hacer algo que no se había hecho antes en Youtube que es viajar con tus seguidores y darles la oportunidad de vivir la experiencia que tú cuentas cada día en las redes con ellos.

    Hicimos un sorteo donde participaron 4000 personas y, tres fueron las seleccionadas. Fue increíble. Hicieron muy buen grupo – entre ellos y con nosotros – y muy buen rollo. Hicimos una piña muy bonita y notabas lo importante que era para ellos viajar con nosotros y vivir esa experiencia. Insisto, fue increíble. Hemos llorado cuando se fueron. Ha sido una experiencia única que nos ha llenado muchísimo y nos ha dado muchas fuerzas.

    Con el tema de la quedada, sorprendidos. Estamos hablando de Londres, a las 5 de la tarde de un jueves, que la gente trabaja, no siempre es fácil poder llegar al sitio que hemos dicho nosotros… Hubo gente que nos escribió diciéndonos que era imposible ir porque quedaba a una hora en metro. Aún así, vinieron más de 20 personas, gente que le gusta viajar, que nos sigue desde hace tiempo. Nos sigue sorprendiendo el cariño cuando viajamos. Estamos encantados.

    Desde que nació la pequeña, os ha acompañado a muchos de los destinos, ¿cambia la perspectiva viajar con niños? ¿Es un tipo de turismo distinto?

    Totalmente, no tiene nada que ver. Antes íbamos mucho más a la aventura, hacíamos autostop, dormíamos en casa de gente. La vuelta al mundo que dimos con la niña cuando tenía año y medio – que fue casi la misma que hicimos nosotros hace años – no tiene nada que ver.

    Antes íbamos más a lo loco y ahora llevas el viaje mucho más preparado. Tienes la responsabilidad de viajar con una niña pequeña y no puedes irte a lo loco. El destino cambia, hay cosas que no puedes hacer precisamente por ir con ella.

    Pero en en fondo, me siento un privilegiado de poder viajar con mi familia y pasar 24 horas al día con ellas recorriendo mundo.

    Quizás también te interese:  "Las redes sociales son aliadas nuestras"

    Por eso, cuando a veces tenemos que ir a trabajar y hacer algo concreto, dejamos a la niña con la abuela y le metemos mucha caña al destino. Hay que respetar sus horarios, que es bastante importante. Tiene que jugar con niños, tiene que dormir.

    Anécdotas tenéis a montones, pero ¿una que hasta ahora no haya sido publicada?

    Estoy pensando y requetepensando y no se me ocurre nada. Se me ocurre una que ya hemos contado que fue en la época en la que dormíamos en casa de la gente. Llegamos a Kuala Lumpur y nos llevamos la sorpresa de la chica que nos alojaba era multimillonaria y estuvimos unos días viviendo en uno de los rascacielos más chulos de la ciudad una vida de lujo. Es curiosa, pero sin publicar no se me ocurre ninguna.

    Comunicáis a través de todas las redes sociales, ninguna se os resiste, pero ¿cuál creéis que llega más a vuestro público?

    Depende. Cada red social es un mundo. Las fotos de Instagram se ven muchísimo y tienen más Me gusta que ninguna otra red. Creo que es donde más se ven las cosas y donde la gente sabe más dónde está. Hoy en día Facebook filtra y como no pagues no muestra el contenido a todo el mundo y Twitter es más al momento. Nuestra red preferida es Instagram, donde se puede seguir más en directo el viaje, al margen de Twitter que también publicamos más cosas.

    Un destino inolvidable para vosotros es….

    Sin duda, el Sudeste Asiático. Nosotros llegamos a Asia para pasar cinco semanas de vacaciones y llegamos pensando que éramos los amos del universo… y vimos que la gente viajaba allí años, viajaban de mochileros, etc.

    Aquello nos cambió. Sobre todo Tailandia. Nos encantaba todo el país y fue nuestro viaje inolvidable porque fue donde nos dimos cuenta de lo que realmente queríamos: descubrir mundo. Fue al tomar distancia cuando vimos que había mucha gente que ya lo hacía.

    Para conseguir vivir viajando, hay que saber plantear bien las cosas, ¿cómo comenzó todo?

    Vivir viajando es muy difícil. Ha costado mucho trabajo, muchos años. Todo esto comenzó abriendo el blog por nuestras madres tanto en español como en polaco, porque nos íbamos cuatro meses al Sudeste asiático y ellas estaban preocupadas por lo que podía pasar. Te hablo de un momento en el que no había ni Whatsapp ni Facebook ni nada.

    El blog se pensó para que nuestra familia y amigos pudieran entrar y ver por dónde andábamos del mundo. Se contaba como quien habla con su madre.

    Poco a poco fue mejorando, según vimos que había gente que también entraba, y fuimos haciendo cosas nuevas. Vas creciendo con el paso de los años y llega un punto en el que mueves bastante gente, te empieza a escribir alguna empresa, empiezas a hacer cosas por intercambio, pringas mucho y, aunque ahora algunas son patrocinadoras y nos pagan algo por viajar, hemos dedicado también mucho tiempo.

    Pensamos en vídeos que es lo que mejor se nos daba, éramos capaces de transmitir las cosas, gustaban además mucho.

    En realidad hemos llegado sin pensar a donde hoy estamos, sintiendo lo que hacemos.  Como abras un blog pensando en vivir de ello es complicado; se tarda muchos años y es muy difícil. Hay mucha gente que se queda por el camino y, además, es mucho trabajo, que es algo que poca gente ve.

    Para llegar a lo que es Molaviajar hoy hay que mandar muchos mails, muchas propuestas que te rechazarán, invertir mucho de tu dinero. De hecho, todo lo que íbamos ganando lo invertíamos en viajar. No hemos tenido coche, ni casa ni casi nada.

    Cada vez hay más “marcas” que confían en vosotros para promocionarlas, ¿eso aporta o a veces interfiere en lo que queréis contar?

    En nuestro caso es genial ya que nosotros tenemos que decir o nombrar marcas sí o sí ya que es un canal de viajes.

    Tienes que dar consejos para que los viajes sean mejores o más barato y acabas mencionando empresas, nombres, productos y no siempre nos patrocinan.

    Que una compañía de seguro de viajes nos patrocine es perfecto porque no puedes salir al mundo sin seguro o un buscador de hoteles o una empresa de mochilas o maletas. En nuestro caso no interfiere la publicidad.

    También es cierto que nos ha venido competencia de alguna de estas empresas ofreciéndonos dinero y cosas para cambiar y eso es algo que tú tampoco puedes hacer. Si tu blog es serio no puedes cambiar por dinero. Llevo recomendando algo diez años y ahora viene alguien, me da dinero, y me cambio. Pues no. No se puede hacer.

    Quizás también te interese:  Cómo la pandemia cambió los criterios de viaje

    Tienes que ser fiel a eso y a la hora de contar un destino, contamos nuestra experiencia. No nos ha pasado algo malo.

    ¿El viajero nace o se hace?

    Mi caso (Adrián). Yo nunca había viajado antes. Mi padre tiene un kiosko, abre siete días a la semana. Durante toda su vida ha trabajado ahí todos los días del año. Nunca hemos viajado en familia.

    Yo creo que me he hecho viajero al salir por primera vez fuera de mi ciudad. Es así como ves que hay otros intereses, otras cosas que enganchan fuera y vas abriendo los ojos por ese mundo. Es difícil esta pregunta porque lo mismo si naces con ese espíritu viajero y poco a poco lo vas desarrollando. Hasta los 17 años no salí de mi ciudad. Ahora no paro.

    Preparar un viaje no siempre es sencillo, ¿nos contáis cómo comienzan vuestras aventuras y cómo las preparáis para que nada – o lo mínimo – falle?

    La verdad es que viajar es más fácil de lo que parece. En la vuelta al mundo teníamos 7 vuelos con meses entre ellos y durante la marcha íbamos preparando el viaje, buscando alojamiento.

    Depende también donde vayas. Si vas al Sudeste Asiático tienes que prepararlo cero porque sobre la marcha es muy fácil. No hay que darle muchas vueltas. En resumen: vuelos, precios de alojamiento, leer en internet los datos.

    En nuestro caso, cambia si vamos por hobbie o por trabajo, tenemos que preparlos de formas distintas. Te pongo un ejemplo: las cinco mejores hamburguesas de NY. Tienes que informarte, ver dónde están, probarlas…Antes era más a la aventura.

    Uno de vuestros principales canales es el de Youtube, donde veros invita a viajar directamente, ¿hay planificación o es tan espontáneo como parece?

    Creemos que el éxito de Molaviajar es la espontaneidad que tenemos. Es lo que te contaba antes. Hoy en día las empresas buscan las vivencias no los supervídeos y superproducciones. Lo mejor es mostrar un viaje tal cual lo vives, saber contarlo y compartirlo y que te pasen cosas, no ser un muermo. Hay que pensar en la gente que ve los vídeos.

    Somos como se ve en los vídeos. En Londres es lo que nos decían: ¡Sois igual o más simpáticos que lo que vemos en los vídeos! Y es cierto. Somos nosotros mismos. Ver una pareja normal, que puede ser cualquiera de nuestros espectadores con la suya, con la que se identifican es la clave de la empatía. Si lo planificáramos todo serían vídeos muy aburridos.

    Para los que os ven de fuera, todo es idílico, pero sabemos que no siempre todo es tan perfecto como aparenta, ¿algo malo de estar todo el día con las maletas a cuestas?

    Hay un vídeo donde lo decimos: Lo que no sabéis de Mola Viajar. No todo es tan bonito.

    Viajar está muy guay pero, cuando es por trabajo tienes que cumplir con las marcas, tienes la presión de contar todo, tienes que conseguir buenos números para poder seguir viviendo de esto… y viajas con la presión de poder cumplir con toda la gente que tenemos detrás, no desconectas, estás todo el día en redes. Vamos, que no estamos de vacaciones como muchos piensan al vernos.

    Echamos de menos un poco de estabilidad y más ahora con la niña. Pretendemos, a partir de verano, que acabamos los proyectos que tenemos, bajar un poco el ritmo y asentarnos en un sitio e ir viajando, pero no cada semana como es ahora.

    Necesitas tu sitio para desconectar y tener tus cosas. Todo cansa. Y con la niña pasa lo mismo, a veces quieres tranquilidad y que te levantas en un sitio y que vas a estar un par de semanas en un sitio sin prisas.

    Está muy bien viajar pero parte de nuestro proyecto es editar y contestar a nuestros seguidores. Hay mucho trabajo detrás y se necesita mucho tiempo.

    Aún con todo esto, estamos muy contentos y queremos seguir luchando y trabajando por mantenernos y seguir dando contenido interesante y bonito a nuestros seguidores.