Maspalomas: la magia de Canarias

Su temperatura, la belleza de sus playas, la naturaleza, una oferta de ocio que cumple con las expectativas de cualquier tipo de viajero…todo eso se puede encontrar en el archipiélago canario.

Al sur de Gran Canaria, además, se encuentra uno de los receptores de turismo más importantes de la isla y, en realidad, casi de toda Europa si se habla en términos de turismo de playa.

¿Qué tiene Maspalomas que convence a todo tipo de viajeros?

Para comprender qué hace de esta zona una de las más mágicas de Canarias habría que pensar en lo que ofrece.

• Para los amantes del surf y de los deportes acuáticos es uno de los destinos que mejores olas y más días de práctica regalan. El hecho de que su playa sea bohemia por sí misma, que albergue una infraestructura de hoteles, como el Hotel Faro, y apartamentos que permite a los deportistas estar casi casi a pie de ola. La temperatura del agua y las escuelas deportivas que han ido surgiendo con los años hacen de Maspalomas uno de los destinos preferidos no solo para los vecinos sino para los deportistas europeos.
• El Faro de Maspalomas. Aunque sea poco conocido, los amantes de los faros saben que su antiguo faro es un reclamo en sí mismo. La estructura, que ha visto cómo ha ido creciendo progresivamente la zona y cómo el turismo ha llegado a desbordar las expectativas. Construido en la segunda mitad del siglo XIX ha sido guía y seguro para los barcos que hacían ruta entre el archipiélago y América y, aunque ahora encabece la zona de paseo, antes era vigía de todo tipo de embarcaciones.
• Zonas de ocio: tanto diurno como nocturno. Los locales acogen al turista para permitirle disfrutar de la gastronomía más típica de Canarias y de la zona de fiesta que sirve como reclamo de ese turismo más joven ávido de disfrute, playa, sol y una música que no para de sonar.
• Reserva Natural de las Dunas de Maspalomas: con el Palmeral, la Charca y las Dunas esta riqueza natural es única no solo en Gran Canaria sino prácticamente en toda España. Hasta aquí llegan amantes de la naturaleza dispuestos a ver el contraste, a escasos metros del mar, de una zona llena de una fauna y flora tan particular como protegida por su ecodiversidad. Muchos han sido quienes han querido buscarle explicación y disfrute y que siguen llegando dispuestos a dejarse llevar por su magia. Según la época del año, además, ver la migración de las aves africanas es todo un espectáculo.
• Destino Starlight: pocos enclaves permiten disfrutar de la visión de las estrellas como este. Quienes quieren descubrir y mirar directamente al universo tienen una cita en Maspalomas y alrededores, donde podrán ver las estrellas como nunca gracias a una baja contaminación lumínica que ha servido de inspiración para grandes fotógrafos que han puesto a prueba sus equipos con gran éxito.
• Destino de turismo lento: hay que saborearlo, disfrutarlo, vivirlo y, sobre todo, sentirlo. Es ese tipo de espacios que permiten relajarse y bajar el ritmo, disfrutar sin prisa y dejarse llevar por la conexión no solo con uno mismo sino con la propia naturaleza. El hecho de que las temperaturas sean estables, además, hacen de él uno atemporal puesto que no importa la estación: todas valen.