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    Investment banking versus Wealth Management

    Por el 27 noviembre, 2014

    Hay muchas formas de inversión a disposición tanto de particulares como de grandes compañías. En ambos casos lo que se busca es consolidar el capital que se tiene pero también buscar una rentabilidad del mismo, consiguiendo traducir esto en beneficios o incluso en un capital extra para seguir invirtiendo.

    Entre los tipos de inversión más comunes se encuentra el Investment Banking, que no es otra cosa que permitir que sean los bancos los que gestionen el capital a través de sus diferentes productos, así como en fusiones o adquisiciones, la creación de mercado, los productos de renta fija o variable o los llamados servicios FICC, más dirigidos hacia las materias primas y divisas.

    En un principio el investment banking estaba dirigido a la compra de los productos de oferta pública, las ofertas secundarias del mercado e incluso el brokerage. Desde luego, la inversión corporativa está muy relacionada con los fondos y mercados de forma que se ofrecen numerosos productos con más o menos riesgo a los inversores, ya sean pequeños o grandes corporaciones.

    Existe otro tipo de inversión que es la denominada Wealth Management, más encaminada no sólo a facilitar productos sino a completar la cartera de gestión con otros servicios como el asesoramiento fiscal o incluso creando nuevos planes de negocio que asistan a los inversores a corto, medio y largo plazo.

    Tiene mucho más que ver con la gestión patrimonial, con lo que hasta hace poco, era el campo de las grandes familias financieras que tenían casi relación directa con los bancos. Pero hoy en día ya no es así, sino que también cuenta con las carteras de gestión de pequeños ahorradores e inversores que pretenden mejorar su riqueza patrimonial a través de inversiones presentes pero que quieren contar con los mejores asesores a sus espaldas para minimizar cualquier tipo de riesgo derivado de la propia inversión.

    Las diferencias entre ambas, pasan por la diversificación de los productos de inversión, pero sobre todo por los servicios complementarios que ofrece una u otra. Desde luego, la persona que lleva ahorrando toda la vida, quiere menos riesgos, pero también que alguien asesore su cartera desde el conocimiento de los beneficios fiscales a los que puede acogerse.

    Investment banking versus Wealth Management, ¿qué elegir? Lo cierto es que a la vista del año de los mercados, cualquiera que quiera hacer una inversión, deberá pensar mucho qué tipo de productos elegir y la clase de rentabilidad que espera a corto, medio o largo plazo para ellos.